En primer lugar, creo que aunque somos un país "en vías de desarrollo", como prefieren venderlo al turista extranjero, existe una amplia variedad de ofertas para visitar en el pequeño territorio que además favorece para hacer paseos del día a la mayoría de los destinos internos.
Por otro lado, creo que es primordial que el salvadoreño promedio se quite dos ideas de la cabeza: a) que hacer turismo es exclusivo de la época de vacaciones; 2) diversión en fin de semana debe dejar de significar ir a un centro comercial solo por no estar en la casa.
Solía creer que nada pasaba en El Salvador, con fines culturales o de puro entretenimiento, y que las opciones dependían de los tour operadores; sin embargo están surgiendo nuevas propuestas para mantener informada a la población para que ahora no tenga como excusa el "no sabía". Bares urbanos y en las distintas playas del litoral para los melómanos en cualquiera de sus géneros, recorridos por la ciudad y talleres de todo tipo (poesía, literarios, muralismo, elaboración de distintos materiales) son solo algunas de las ofertas que mes a mes se ofrecen como válvula de escape, aprendizaje y entretenimiento.
Los pueblos vivos que compiten por ganarse el premio otorgado por el Mitur cada año no se quedan atrás, y por lo general cada fin de semana o quincenalmente abren sus puertas para recibirle con el calor humano que distingue a los habitantes de cada lugar.
Así que usted, si tiene el tiempo (lastimosamente no todos gozan de fechas fijas de vacación) y el recur$o para darse una escapada a cualquiera de los rincones que el paisito ofrece,... ¡Pase adelante!
Nota: hay tanto lugar bonito que prefiero elija usted la que mejor acompañe las bellezas del terruño.
