Pages

martes, 2 de agosto de 2011

Impresionante

0 comentarios


No, no basta con hacer la campaña para llamar miles de turistas y mostrarles las cosas lindas que tiene el país. No es suficiente. No puedo imaginar que sea suficiente para las autoridades tratar de llenarse de recursos utilizando la imagen de los lugares que aún se muestran verdes en el país. Los lugares que han sobrevivido al destrozo de las empresas constructoras, los que han logrado sobrevivir al avasallador paso del progreso, son aquellos que siguen mostrándose como lo más llamativo para que se llene de alemanes, canadienses, etc, emocionados por ver lo que un pequeño país del tercer mundo puede ofrecer. ¿Podemos ofrecer algo?

Afuera somos conocidos por muchas razones en diversos lugares. Seguimos llevando un poco el estigma de la guerra de 12 años que vivimos y que es llevado como estandarte por fotógrafos de guerra y artistas que no dejan que olvidemos todo lo que sucedió. Y hacen bien. Pero también somos conocidos por situaciones que en muchos casos están fuera de nuestro control como sociedad y simplemente no se puede hacer más que ver como el concepto de nuestro país se define por esto.
Y no es una situación de un año. El índice no hace más que crecer dado que poseemos uno de los porcentajes más altos de inseguridad. 
No quiero decir con lo anterior que el país no tenga cosas buenas. El turismo es necesario, es una fuente de ingresos imprescindibles. Hay muchas cosas que el país puede brindar. Pero no es difícil hacerse un par de preguntas.
¿Puede un país que no le otorga seguridad a sus ciudadanos en forma plena, ofrecer la misma a los turistas que vienen confiados?
¿Puede un país que no es respetado por sus mismos gobernantes, ofrecer a los turistas el bienestar (aunque momentáneo y por un altísimo precio) que están obligados constitucionalmente a ofrecer a sus ciudadanos?
Todo eso. Toda esa duda se me hace impresionante. Todo lo que pasa a diario en el país es más que impresionante.
No tengo nada contra mi país. Nada. Me gusta. Pero hay que enfrentar la verdad. Tenemos un turismo mentiroso que no termina de beneficiar más que a algunos empresarios y al gobierno. 
Y al final usted no me crea.  Es mi opinión nada más.

Leave a Reply

Seguidores